sábado, 6 de septiembre de 2014

Capítulo 25

Capítulo 25
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Redadas en el aeropuerto


Fernando había logrado desahogarse con Eduardo contandole todo lo que había pasado con Lety desde su cumpleaños hasta la mañana del domingo.

F: De seguro estás pensando que soy un monstruo por lo que le hice ¿verdad?

E: Bueno, seguramente no eres un santo, pero me consta que la amás ¿No es asì?

F: ¡Con toda mi alma Lalo!

E: Entonces, ¿Para que insistes en casarte con Marcia?

F: Pues porque... ¡Lety no me ama! Ella misma me dijo que se enamorò de otro hombre...

E: Esa no es excusa...

F: Bueno, digamos que ce la debo a Marcia. Ella siempre se ha quedado a mi lado, a pesar de todo. Imagínate... Le dije que era verdad que tenía una amante y con todo ¡ella sigue comigo!

E: Entonces ¿Te casas con ella por agradecimiento? ¡Eso es todavía peor!

F: ¡No Lalo! Peor sería dejarla después de todo lo que ella ha hecho por mi. En el fondo le tengo mucho cariño; ella me gusta y juntos... Pues nos la pasamos bien.

E: Insisto Fernando. ¡Eso sería el error más grande de tu vida! ¡Tu no estas enamorado de Marcia!

F: ¿Entonces que es lo que tengo que hacer? ¿Dejar a Marcia y llorar toda la vida para Lety? Mira Lalo... Yo he hecho sufrir mucho a Leticia ¡Pero te aseguro que yo también vivì las penas del infierno! No pasa noche ne que no llore para ella pero eso no me sirve de nada... Ella se enamorò de otro y yo la perdì... ¡Ahora es demásiado tarde!

E: ¡Nunca es tarde cuando se ama! ¿Estás completamente seguro que lo que te dijo Lety es cierto?

F: ¿Para que me hubiera mentido?

E: Pues no sé pero algo no me cuadra...

F: ¿?

E: Cuando conocì a Lety, ella estaba perdidamente enamorada de dizque Tomás, que me imagino era tu nombre de cobertura ¿verdad?

F: Sì, asì es. Yo mismo le dije de decir al Cuartel que su novio era Tomás Mora; para evitar cualquier sospecha sabes...

E: Bueno. En esa epoca su aura brillaba. Se percibía perfectamente que ella estaba totalmente y incondicionalmente enamorada de “su novio” y tengo que confesarte que ¡nunca había percebido un amor tan grande! ¡Hasta puedo decirte que su amor para ti era infinito!

F: Sì pero eso pasò cuando todavía ella no sabía nada del dichoso plan de Omar...

E: No es por eso que te lo estoy diciendo

F: ¿Entonces para que?

E: Mira Fernando, me parece muy raro que un amor tan grande desvanesca en tan poco tiempo... Yo estoy seguro que Lety sigue enamorada de ti

F: Eso sería un sueño... ¡Lastima que no es asì!

E: ¿Porque lo dices con tanta seguridad?

F: Es complicado de explicar...

E: Intentalo

F: Està bien... Cuando ella y yo hicimos el amor, la noche del sabado, volvì a sentirla completamente mia. Ella era tan entregada... ¡Tal como la primera vez! Te 
juro que fue magico hermano...

E: ¿Y luego?

F: Luego dormimos juntos toda la noche. Ella se recostò en mi pecho y se durmiò entre mis brazos...

E: Entonces ¿Porque te dijo semejantes barbaridad la mañana siguiente?

F: No sé Lalo, ¡Juro que no lo sé! Y te juro que jamás le hubiera creído si ella no me hubiera dicho todo eso mirandome fijo en los ojos

E: ¿Y tu te convenciste solo porque te lo dijo mirandote en los ojos?

F: ...No Lalo, yo los vì
E: ¿A quién?

F: ¡Vì a Lety besandose con ese mendigo infeliz!

E: ¿Pero cuando?

F: Los incontrè en la playa besandose cuando yo fui por ella la noche del sabado. Antes que hicieramos el amor...

E: Eso es todavía más absurdo. ¿Porque hizo el amor contigo si dice que ama a ese otro hombre?

F: ¡Pues yo que sé! Ay Lalo ¿Sabes que? Se me estalla la cabeza. ¿Que te parece si nos acostamos y mañana seguimos con la platica?

E: Està bien Fernando, como quieres

Los dos se acostaron pero Fernando no pudo pegar un ojo, no solo por la platica con Eduardo, si no también porque era consciente que el día siguiente Lety regresaría de Acapulco

La mañana del domingo había empezado a las 6 para Lety y Carolina. Las dos habían ido al aeropuerto en taxi y, a pesar de todo, Lety se sentía bastante relajada.

C: ¿Como te sientes Lety?

L: Me siento tranquila. Ha de ser porque esta noche logré dormir algunas horas

C: ¡Que bien! Porque nos espera un vuelo en avion y no quiero verte agitada como la otra vez

L: Ji ji ji voy a tratar de estar más tranquila esta vez

C: Bueno. Cambiando de tema.... Que raro que Aldo todavía no haya llegado...

L: ¿Si verdad? Ayer me dijo que venía a saludarnos aquì al aeropuerto

C: ¿No serà que se quedò frío por tu actitud de ayer en la noche?

L: Ay no ¿Como cree? ¡Él sabe perfectamente bien que yo amo a Don Fernando!

C: Si pero me consta que tu les gustes mucho y no creo que se vaya a quedar de 
brazos cruzados...

L: Yo tampoco lo creo. Es más... él mismo me dijo que quería venir a México por tratar de hacerme enamorar de él

C: ¿Y tu que le diciste?

L: Pues, en ese momento estaba muy dolida con lo de Don Fernando entonces le dije que para mi era un gusto que me acompañara

C: ¿Y sigues pensandola asì?

L: Bueno, lo que me espera en Conceptos no es nada facil y prefiero ser rodadas de amigos puesto que todavía no sé como se va a acabar lo de Don Fernando...

C: Pero no creo que Aldo sea dispuesto a ser solo “tu amigo”...

L: ¡Pues tiene que conformarse! ¡Ya se lo dije a él que solo podía ofrecerle mi amistad y él aceptò!

C: ¡Està bien Lety, no te alteres!

Voz: Se avisan los pasageros del vuelo B712 dirigido a Ciudad de México, que el vuelo despegarà con una hora de retrazo. Nos disculpamos por la inconveniencia

C: Bien, parece que tenemos tiempo para desayunar...



Aldo, mientras tanto, había quedado embotellado en el trafico a causa de un axidente

A: ¡No puede ser! ¡No puedo llegar tarde justo hoy o no voy a poder despedirme de Leticia! ¡Ella tiene que saber que es la mujer de mi vida!



En México, Lalo y Fernando estaban desayunando y este último le estaba contando que el lunes tenían una junta del comité donde estaría presente también Leticia

E: ¡Entonces mañana volveras a verla hermano!

F: Sì...

E: ¿Y ahora porque traes esa caras?

F: ¡Porque es la única que tengo! Y además ¿Que quieres que haga? ¿Que me ponga a bailar porque regresa la mujer que me rompiò el corazón?

E: Bueno, si te ayuda...

F: ¡Lalo!

E: Ok, ok ¡Perdón! ¿De verdad no quieres hacer nada?

F: ¿Como que?

E: No sé, interceptarla en el aeropuerto por ejemplo...

F: ¡Ya Lalo deja de decir tonterias! Y además tengo que ir a ver a Marcia...

Lalo hizo una mueca

E: Claro claro tu prometida...

F: ¿De verdad no tienes nada mejor que hacer que burlarte de este pobre hombre?

E: Ya ya entendì... Me voy a dar una vuelta. Nos vemos después

En cincos segundos Lalo saliò de la casa de Fernando.

F: ¡No lo puedo creer! ¡Sabes perfectamente que quiero olvidarme de Leticia y, no solo insiste en que ella todavía me ama, si no que encima, ¡me pone esas pulgas en el oreja! Ir al aeropuerto... ¡Eso es ridiculo!


El reloj marcaba 10 para la 9 cuando Aldo llegò al aeropuerto corriendo como un loco. Llegado delante la cartelera de los vuelos, respirò aliviado cuando se percatò que el vuelo de Leticia despegaría en retrazo, a las 9 y media. Todavía tenía tiempo pero tenía que localizar a Leticia puesto que no estaba en la sala de espera.
Lety y Carolina estaban todavía sentadas en la cafeteria cuando Carolina visionò a Aldo.

C: Parece que llegò tu Romeo...

L: ¿Que?

C: ¡Ya Lety, es bromita! Llegò Aldo

Lety hizo una mueca

L: ¡Ay que chistosa es usted!

Las dos salieron de la cafeteria y alcanzaron al güero.

C: ¡Hola Aldo!  Pensábamos que no hubieras venido...

A: Es que me quedé emotellado en el trafico a causa de un axidente. ¡Hola Leticia!

L: Hola Aldo, buenos dias

Aldo quedò enbabiado a mirar a Leticia

A: ¡Por suerte retrazò el vuelo! Nunca me lo hubiera perdonado si no alcanzaba a saludarte... Digo, ¡A saludarlas las dos!

Carolina sonriò entendiendo perfectamente la intención de su amigo.

C: Bueno, yo me adelanto al gate y los dejo despedirse. ¡Nos vemos pronto Aldo!

Carolina le guinò el ojo y se alejò

A: Leticia yo... quería decirte algo antes que te vayas. ¡Es que ayer no me dejaste 
hablar!

L: Perdoname Aldo, es que ayer fue un día bastante raro y, la verdad, estaba muy cansada en la noche.

A: Entiendo... Bueno ahora pero no hay nada que impida que yo lo haga

L: ¿Hacher que?

A: Esto...

Aldo se acercò a Lety, la tomò por los hombros y la atrajò a sí, besandola profundamente

Lety se quedò pasmada y inmóvil. Aldo separò sus labios de los de Lety y se despidiò de ella

A: Te amo Leticia. ¡Nunca se te olvides! Nos vemos en unos dias mi amor...

Lety no tuvo tiempo de decir nada puesto que Aldo ya había desaparecido. Cuando llegò donde Carolina, Lety estaba furiosa

C:¿Se despidieron?

L: Arg...

C: ¿Que te pasa?

L: ¡Me pasa que Aldo es un descarado!

C: ¿Porque, que hizo?

L: ¿Quiere saber que hizo? ¡Pues me besò!

Carolina quedò boquiabierta

C: ¿Y tu te dejaste besar?

L: ¡No hubo de otra! ¡Me tomò de sorpresa y no tuve tiempo ni de reaccionar!

La señorita de la compañía aérea interrumpiò la platica puesto que era hora de embarcarse.



Fernando, mientras tanto, no lograba quitarse de la mente las palabras de Eduardo... “Interceptarla en el aeropuerto, por ejemplo”.

F: Interceptarla en el aeropuerto... ¡¿Pero como si no sé ni a que hora llega el vuelo?! ¡Pues claro! ¡Voy a averiguar en el sito internet de la compañía aérea!

En un santiamén Fernando encendiò su laptop y se percatò que el único vuelo desde Acapulco de la jornada, aterrizaría a las 10 y 20. Fernando mirò su reloj que marcaba las 9.40.

F: ¡Tengo que salir ahorita mismo!



En el avion, Carolina y Lety retormaron la platica

C: ¿Estás segura que no disfrutaste ese beso?

L: ¡¿Como cree Doña Carolina?! Los unicos besos que deseo, son lo de Don Fernando...

C: ¡Bueno està bien! Suerte que mañana lo vas a ver...

L: Si, mañana... Awww

Lety mirò afuera del oblò y se quedò en las nubes, tal como las que veía allì afuera. 
Su mente la regresò a aquella noche antes de la junta del comité...

F: “Yo sé que usted no siente nada para mi pero ¡yo la AMO!”

Entonces ¿Fernando era sincero? ¿De verdad se había enamorado de ella? Lety se sentía una estupida, primero por no haberle creido y después por todo el dolor que le causò con sus mentiras, la mañana de domingo.


En meno de una hora, el avion había llegado al aeropuerto Benito Juárez de Ciudad de México. Fernando estaba parado delante la puerta del area de las llegadas desde las diez; su corazón latía fuerte. A pesar de todo lo que había pasado, él seguia amando a Leticia con toda su alma. Era algo más fuerte que él... Su amor para ella era infinito y la iba a amar hasta el final de su propria vida. Fernando checaba la hora cada diez minutos, impaciente por volver a ver a su amada.

F: ¿Que voy a hacer cuando la veo? De seguro no puedo correr en sus brazos... No solo porque sería ridiculo, ¡si no porque de seguro me va a rechazar! ¡Ella no puede verme aquì! Tengo que esconderme...

No muy lejos desde donde se encontraba Fernando, estaba una columna

F: ¡Perfecto! ¡Me voy a esconder allì asì que Lety no me vea cuando llega!

El avion había terminado las maniobras de aterrizaje y Carolina y Lety habían desembarcados. Cuando las puertas del aeropuerto se abrieron, Lety y Fernando sentiron la misma sensación: sus corazónes empezaron a later como locos y los dos se pusieron una mano en el corazón.

F: Aww ¡Lety es todavía más bella de cuando la vì en Acapulco! Bueno, ella siempre ha sido hermosa...

Fernando se quedò en Babia mirando a Leticia

Lety, por su parte, se sentía rara...

C: ¿Que te pasa Lety?

L: Es que... ¡Siento la presencia de Don Fernando aquì!

Carolina checò en todos lados pero no logrò ver a Fernando

C: Yo no lo veo...

L: ¡¡Pero estoy segura que él està aquì!!

Fernando se pasmò. ¿Posible que Leticia había logrado verlo?

L: Perdón que grité Doña Carolina; no sé que me pasa...

C: No te preocupes Lety. Vamos por el equipaje

Las dos mujeres se traslaron en el lugar de las valijas y Fernando las siguiò. Solo una pareja de novios estaba entre él y su Lety...

Fernando caminaba cuidadoso, tratando de no hacerce descubrir; en ese momento era el hombre más feliz del mundo y tenía una sonrisa de oreja a oreja: su Lety, por fin, había regresado a México.

Cuando Lety y Carolina salieron del aeropuerto por pedir un taxi, Lety quedò boquiabierta al percatarse que, justo delante de la entrada del aeropuerto, estaba estacionado un coche igual a lo de Don Fernando.

L: No puede ser... esto es...

Lety no lograba articular palabra

C: ¿Que es?

L: ¡El coche de Don Fernando!

Fernandò serrò los puños y maldiciò su mala suerte por la mala temporada

F: ¡Chin! ¿Como pude ser tan imbécil de estacionar mi coche justo allì? ¡Ahora si me descubriò!

Leticia sonriò. El solo saber que su corazón no se equivocaba y que él estaba allì, la hizo feliz

C: Que casualidad que esté aquì...

L: Sì ¿verdad? Quién sabe que hace por aquì... Talvez su mamà regresò en Londres y hoy viene a México para la junta de mañana...

C: Me parece un poco absurda esa ipotesi...

L: ¿Y que le pareciera más sensado?

C: Que él vino por ti por ejemplo...

Fernando tragò saliva. ¿Carolina se había dado cuenta de sus sentimientos por Lety?

L: Ja ja ja ¡Si ni siquiera sabía que yo iba a regresar hoy! Na, de seguro està aquì por otro motivo

C: ¡Tu y tu escepticismo! ¿Quieres entrar a buscarlo?

Fernando se animò...

L: ¿Como para que? No, mejor vamonos

...pero se desanimò por completo después la respuesta de Leticia y después que las dos subieron en el taxi y se alejaron del Benito Juárez

Cuando Fernando regresò a su casa, Lalo lo esperaba en el living

E: ¿Entonces?

F: ¿?

E: Ya Fernando, ¡No te hagas! Fuiste por ella ¿verdad?

F: ¿Y tu como sabes? Y sobretodo, ¿Como le hiciste para meterte en la casa si no traes llaves?

E: Da la casualidad que “alguien” dejò la ventana abierta entonces entré

F: ¡Chin! ¿Donde tengo la cabeza ultimamente?

E: ¿Quieres que te conteste yo?

Lalo alzò las cejas picaramente; Fernando se fastidiò

E: ¿No me quieres contar como te fue con Lety? ¡Andale Fer!

F: Ok, ok... Es cierto, fui a verla al aeropuerto

E: ¿Y?

F: Y nada, la vì

E: ¡Ya Fer, no seas tan hermético!

F: ¡Es que no hay nada que contar! Me escondì detrás de una columna y la vì llegar sin acercarme a ella

E: ¿Y porque no te acercaste? ¡Podías hablar con ella!

F: ¿Para que? ¿Para que me rechazara?

E: Ay Fernandito Fernandito... ¡Nunca vas a aprender! Ya te dije que Lety te ama y estoy seguro que se habría puesto la mujer más feliz del mundo al verte allì, ¡y encima por ella!

F: Eso no es cierto... Lety viò mi coche estacionando y cuando Carolina le preguntò si quería buscarme en el aeropuerto, ella se negò y se fueron

E: ¿Y que pretendías? ¡Eres tu el que la tenía que buscar!

F: Como sea Lalo... Por ahora me conformo con el hecho de haberla visto... Ay Lalo si supieras... ¡Estaba hermosa mi Lety!

Lalo sonriò

E: Ay Fernando, estás peor de lo que me imaginé... ¿Que esperas a interceptarla en su casa?

F: Te confieso que me gustaría pero no puedo. De verdad... ¡No puedo hacerle esto a Marcia! Ya fue demasiado que haya ido por ella al aeropuerto...

E: Està bien hermano. Igual mañana la ves en Conceptos ¿No?

Fernando solo sonriò



Mientras tanto, Lety había llegado a su casa

L: ¡Hola familia!

DE: ¡Hija! ¡Que bueno que regresaste en tu casa!

L: ¡Hola papacito!

DJ: ¡Lety, mi vida!

L: ¡Mami!

DJ: ¿Como te fue?

L: Bien mami, bien...

Julieta había una expresión afligida. Sabía que su hija no podía hablar de ciertas cosas ante de su papà entonces esperò a que Erasmo saliera antes de platicar con Lety. Leticia todavía no sabía que había sido su mamà a revelarle su paradero a Don Fernando y Julieta temía una regañada por parte de su hija.

Quedadas a solas en la habitación de Lety, Julieta se atreviò a preguntarle

DJ: ¿Tuviste algun problema allì en Acapulco?

Lety entendiò de inmediato

L: Fuiste tu ¿verdad?

DJ: ¿A hacer que?

L: Ay mamà ¡No te hagas! ¿Le dijiste a Don Fernando que yo estaba en Acapulco?

DJ: Es que... él vino a hablar conmigo y... bueno ¡me hizo tanta pena!

L: ¿Y de que hablaron?

DJ: ¿No te imaginas? ¡Pues de ti mi vida!

Lety tragò saliva

L: ¿Y que te dijo?

DJ: Me contò “su versión” de su historia contigo...

Lety estaba visiblemente nerviosa

DJ: ¡Ay Lety me contò una historia distinta de la que me contaste tu! Me dijo que todo lo que decía esa maldita carta era mentira y que ¡de verdad él se enamorò de ti!

L: ¿Y tu le creiste?

DJ: ¿Y como no podía después de semejante confesión?

L: ¿Que confesión?

DJ: Bueno me contò de cuando hicieron el amor la primera vez...

Lety sonrojò visiblemente y estaba boquiabierta

DJ: Me dijo que te sintió tan entregada y tan enamorada esa noche; tanto que al final, ¡él terminò con enamorarse de ti! Es más... me dijo que sintió que tu y él eran la misma persona en ese momento y que siguió pensando en ti por toda la noche

Lety seguia apabullada

DJ: Después me dijo que tu eres un angel y que, luego de esa noche, empezò a portarse más lindo contigo porque lo que hacía, le nacía del corazón

L: En efecto es cierto... Después de esa noche, él se portò más lindo conmigo... Lo sentía más cariñoso

DJ: ¡Y eso no es todo! Me contò también de tu celos por la tal Manterola y que él te vino a buscar al Museo de ceras por hacer la paz contigo

L: ¡Ay no! ¿Te contò también lo que pasò después?

DJ: Pues sì... ¡Pero me dijo algo que tu no me contaste!

L: ¿?.

DJ: Él me dijo que esa noche te confesò que quería pasar contigo el resto de sus dias y de su vida porque tu eres ¡la mujer de su vida!

L: Ay si, como no... ¡Por eso se va a casar con Doña Marcia!

DJ: ¿¡Que!?

Lety, en tono socarron: ¿No te dijo? Pues que raro porque todo mundo sabe que se casa el 15 de Noviembre...

Doña Julieta había quedado boquiabierta. ¿Como podía Fernando confesarle semejantes intimidades y después casarse con otra? Algo no cuadraba...

DJ: No, ¡Eso no puede ser! ¡Él me jurò y me perjurò que està enamorado de ti y que quiere estar solo contigo! Entonces eran todas mentiras... ¡Y yo fui tan tonta de revelarle tu paradero! Seguro quería armarte un escandalo por lo que pasò en la empreza ¿verdad?

L: No mamà, todo lo contrario... ¡Él fue muy dulce conmigo!

DJ: ¿Dulce?

L: Sì... Él vino hasta Acapulco en coche solo para decirme que me ama y que me necesita

DJ: Claro... ¡Por su empreza!

L: Al inicio yo también pensé eso pero pasaron cosas que me hicieron ver la situación más claramente...

Lety le contò a su mamà todos los acontecimientos de Acapulco: su “amistad” con Aldo; la llegada de Fernando (omitiendo pero que habían vuelto a hacer el amor); las mentiras que le dijo para alejarlo de ella después de la llamada de Marcia y el descubrimiento sobre las tarjetas.

DJ: ¡Mi amor pero todo eso hace pensar que él de verdad te ama!

L: ¡Ya sé mamacita! Por eso me parece muy rara su intención de casarse con ella... ¡Seguro està de por medio la empresa!

DJ: Bueno como sea mañana lo vas a ver ¿no? ¡Aprovecha por hablar con él y aclarar la situación!

L: Eso es lo que quiero hacer. Solo espero que quiera escucharme después de lo que le dije. Ay mamà ¡Me siento pesima por lo que le inventé! Doña Marcia le contò a Carolina que él se puso como un loco cuando regresò a México esa noche y eso fue por mi culpa!

DJ: No Lety, ¡No te tortures asì! Mañana vas a hablar con él y verás que todo se va a solucionar...

L: Ojalà...

DJ: Ahora descansa un poquito y yo te aviso cuando està listo el almuerzo

Doña Julieta diò la bendición a su hija y le besò la frente antes de bajar en la cocina.

El resto de la jornada pasò tranquilo para Lety. En la tarde, Tomás fue a verla en su casa y ella le contò sobre la junta de mañana en Conceptos

T: Claro, ¡Ahora tienen miedo! ¡Deberías aprovecharte y quedarte con las dos emprezas!

L: Ay Tomás ¿Como crees? ¡Nunca voy a hacer algo asì!

T: Claro...nunca podrias hacer semejante desplan a Mandiola ¿verdad?

L: ¡Mendiola Tomás! Y no es por eso. ¡Es una cuestion de moralidad!

T: Sì moralidad... ¡Ay no te hagas Lety! ¡Tu estás todavía enamorada de ese tipo! ¿Acaso no es asì?

Lety no tuvo tiempo de contestar puesto que Erasmo los llamò para merendar

T: ¡Te salvò la campanilla!

Lety solo hizo una mueca



Fernando, en lo contrario, había pasado una jornada muy agitada a pesar de los intentes de Lalo para tranquilizarlo...


Finalmente la noche había calado sobre la Ciudad de México. Lety estaba en su cama, algo inquieta por la junta de la mañana pero, sobretodo, estaba ansiosa de volver a ver a Don Fernando

L: ¡Por fin! ¡Por fin voy a verlo mañana! ¡Dios estoy tan nerviosa! Solo espero que él quiera escucharme...

Fernando también estaba agitado. Como de costumbre, paseaba de ariba por abajo en su recamara hasta que se sentò en el sillón frente de la ventana

F: ¡Basta Fernando! ¡Si sigues asì no vas a llegar hasta mañana! ¡Tienes que calmarte! Sì, ¡Como si estubiera facil! ¿Con que cara voy a mirarla mañana? ¡Ya basta! Mañana verás...

Fernando se había metido finalmente en la cama y, tras un piensamiento y otro, logrò dormirse a las tres de la mañana.


Habían pasado de poco las 7 cuando el despertador de Leticia sonò. Tras abrir los ojos y levantarse, Lety se mirò en el espejo que tenía colgado detrás de la puerta de su cuarto.

L: Hoy es el gran día... ¡Allì te voy Lety! ¡Voy por ti mi amor!

Fernando se despertò de golpe, pronunciando el apellido de su amata...

Sigue...



3 comentarios:

  1. Boa noite. Adorei lê a tua fic. Você escreve muito bem. Continue assim. Parabéns. Bjos

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    1. Gracias querida! Ahorita voy a poner los otros capitulos :)) Un beso! <3<3<3

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  2. Gracias . Já estava ansiosa esperando os próximos capítulos. Bjos :D

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